Botox útil para tratar problemas de la vejiga


Botox no es sólo para suavizar las arrugas.

Botox, el medicamento que se ha suavizado las cejas de costa a costa, es mejor conocido como un medicamento que se usa en la medicina estética. Sin embargo, también tiene uso en el tratamiento condiciones médicas, incluyendo problemas de la vejiga. Tres estudios independientes evalúan qué tan bien funciona el Botox a ayudar a personas con problemas de vejiga hiperactiva.

Un estudio examinó el uso de Botox (toxina botulínica tipo A) en el control de la incontinencia urinaria en pacientes con síndrome de vejiga hiperactiva. Las inyecciones de Botox funcionan bloqueando los músculos y los nervios de la vejiga que causan un sentimiento de necesidad urgente de orinar. Casi el 40% informó de que eran capaces de controlar su incontinencia urinaria durante al menos 6 meses y casi el 30% dijo que sus síntomas estaban bajo control durante más de un año.

Un segundo estudio analizó la incidencia de un efecto secundario del tratamiento de Botox para la vejiga hiperactiva que no ha conocido la causa, retención de orina que requiere cateterismo. Se encontró que casi el 21% de los pacientes que tienen un primer tratamiento necesario cateterismo Botox, pero que el 40% de los pacientes que experimentaron retención urinaria continuó teniendo un segundo tratamiento de Botox.

El tercer estudio se centró en los resultados a largo plazo para las personas con hiperactividad de la vejiga debido a problemas con los nervios que fueron tratados con Botox. Se encontró que alrededor del 88% de los pacientes experimentaron una reducción del 50% o más en los episodios de incontinencia urinaria por día y que hasta un 52% de los pacientes reportaron reducciones en la incontinencia urinaria cada año de tratamiento. El efecto secundario más frecuente fue la infección del tracto urinario.

Se reportaron estos estudios en la Reunión Anual de la Asociación Americana de Urología.

Botox está aprobado para su uso en el tratamiento de la vejiga hiperactiva en pacientes en los que otros medicamentos no funcionan lo suficientemente bien o no se pueden tomar. La primera línea de tratamiento para la vejiga hiperactiva es una clase de medicamentos llamados anticolinérgicos.

Además de los problemas de la vejiga, el Botox se utiliza para tratar varias condiciones que involucran espasmos musculares, así como las migrañas crónicas y la sudoración excesiva.


Por favor, evaluar este artículo