Las personas con artritis pueden beneficiarse de yoga


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LA nuevo estudio sugiere que el yoga no sólo es seguro, sino también beneficioso para los pacientes con artritis, una afección caracterizada por rigidez e inflamación de las articulaciones.

Un ensayo aleatorio llevado a cabo por los investigadores de la Universidad Johns Hopkins liderados por el profesor de medicina asociado de la universidad y jefe de Johns Hopkins Arthritis Center Dr. Clifton Bingham III mostró que el yoga puede mejorar no sólo el estado de ánimo, sino también la salud física de las personas con artritis, especialmente las personas con artritis reumatoide y la osteoartritis de rodilla. Estos dos son algunos de los tipos más comunes de artritis.

El estudio tuvo 75 participantes, todos los cuales fueron diagnosticados con cualquiera de los dos tipos de artritis. Ellos fueron divididos aleatoriamente en dos grupos. Uno de ellos tuvo que asistir a clases de yoga dos veces a la semana y la práctica de yoga en casa una vez a la semana. Los otros fueron colocados en la lista de espera. En comparación, los investigadores también evaluaron la salud mental y física de los participantes antes y después de las sesiones. Sin embargo, los que lleva a cabo la evaluación no sabían a qué grupo los participantes pertenecían.

Después de ocho semanas, el equipo analizó los resultados y se enteró de que los que realiza yoga experimentaron al menos un 20% de mejora en su bienestar físico y mental. No sólo eran menos dolor, pero también tenían un estado de ánimo feliz. También fueron capaces de funcionar de manera más adecuada ya sea en casa o en el trabajo. Estos cambios positivos duró nueve meses.

Sin embargo, no hay mucha diferencia entre los dos grupos en cuanto a la velocidad al caminar, fuerza superior del cuerpo, y el equilibrio.

De acuerdo con la Arthritis Foundation, alrededor de 50 millones de personas son diagnosticadas con artritis, y la condición es una de las principales causas de discapacidad, ya que puede limitar significativamente sus actividades físicas y movimientos como caminar y flexión.

Yoga, por otro lado, se ha convertido en una terapia complementaria creciente especialmente para las personas en el dolor físico.

Sin embargo, los investigadores hacen hincapié en la importancia de la seguridad sobre todo porque la enfermedad puede hacer que algunas articulaciones vulnerables. Los pacientes que estén interesados ​​en hacer yoga deben discutir posibles modificaciones plantean.

El estudio completo está disponible en Diario de Reumatología desde abril.


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